El pasado abril, el equipo del MicroToxMap (MTM) desarrolló unos talleres de capacitación en escuelas rurales de Hornopirén y Ancud. Estos talleres fueron el primer contacto que el equipo del MTM tuvo con niños y la experiencia superó todas las expectativas. Los chico/as mostraron grandes habilidades ensamblando el microscopio y tomando fotos de microalgas de gran calidad con sus móviles. Tanto fue la buena acogida del microscopio de papel, que se va a introducir como una herramienta más para las clases de ciencia en estos centros.
No solo los niños quedaron fascinados ese día, el equpio del MTM también quedó muy sorprendido de las habilidades de esta joven generación y de su potencial para ayudar a proyectos científicos como éste. Cuando el proyecto MTM fue concebido, se pensó que sus principales usuarios serían profesionales del sector acuícola u otros sectores. Sin embargo, después de esta maravillosa experiencia con los alumnos, aprendimos que las escuelas son un gran nicho para el desarrollo de proyectos de ciencia ciudadana.
Como científicos, pocas veces tenemos en nuestras manos una herramienta tan poderosa como el foldscope con que poder inspirar a los más jóvenes a descubrir y entender el mundo que les rodea. Desde el MTM nos comprometemos a incentivar la curiosidad y la educación científica a las nuevas generaciones de Chile.
